Desde que nacemos, en cada etapa de la vida, nuestras necesidades dietéticas, nutricionales y alimentarias son muy diferentes ; no son las mismas las necesidades que tiene una niña de 18 meses, o un hombre que trabaja en la obra con 36 años, o una gimnasta de 15, o el vecino de arriba, que acaba de cumplir 81 años.
Nos empiezan a alimentar desde que estamos en el vientre materno ; controlando lo que es bueno para nosotros, evitando riesgos ; que si que el pescado siempre congelado, la carne muy hecha, …
Cada bebe cubre sus necesidades específicas con la lactancia materna, siempre la mejor opción al poder ser. Poco a poco se incorporan alimentos nuevos, cada uno en su momento ; hasta tener en nuestra dieta todos los alimentos necesarios.
Vamos creciendo, y cada vez necesitamos más energía, de niños a adolescentes, más adelante la edad adulta y después la edad avanzada ; en las mujeres empieza esa época tan sonada; la menopausia.
En esta época los cambios hormonales, los cambios corporales, hacen alarmar a muchas personas que empiezan a hacer dietas para bajar de peso, disminuir los sofocos,… pero la mejor manera de combatir o prevenir las consecuencias siempre será la práctica de hábitos saludables ; Una alimentación familiar saludable será fundamental para disfrutar de los nuestros, desde el más pequeño de la casa, hasta los más mayores.




